378-MAISON VIEILLE-REFUGIO WALTER BONATTI. 5ª ETAPA

Distancia: 19.36 km.

Desnivel positivo: 1146 m.
Desnivel negativo: 1044 m.
Tiempo empleado: 8 horas 27 min.

Después de una noche reparadora ya estamos levantados para afrontar una nueva etapa.

Hemos pasado la noche en Maison Vieille a 1956 m.

¡En marcha!. Como todos los días hace fresquete por la mañana.

Hoy comenzamos bajando, unos 750 m. de desnivel.

De momento no tenemos vistas, a ver si hay suerte y levanta.

Al principio atravesamos pistas de esquí.

Pero mas adelante caminamos por un sendero por el bosque.

Dolonne, hacemos una pequeña parada para coger agua, llevamos unos 4.5 km.

Atravesamos el pueblo.

Después hacemos una parada en Courmayeur, donde hacemos acopio de fruta y algún que otro comestible.

La sede de los guías del pueblo.

Abandonamos el pueblo, el día sigue tristón, por lo menos no llueve.

Vuelta a los senderos, esta vez cuesta arriba.

Nos acercamos al refugio de Giorgio Bertone.

Nos detenemos un poco mas arriba a reponer fuerzas, llevamos casi 12 km. y estamos a 1980 m. de altura.

Se pone a llover, y yo no me pongo contento...

El día está muy romántico y tal, pero a mi dame el solete.

Seguimos adelante, no hay otra.

La caminata es agradable, los últimos 7 kilómetros son sin apenas desnivel.

La pena son las vistas (la falta de ellas).

De vez en cuando se asoma alguna montaña y nos dan unos alegrones como si hubiéramos descubierto la penicilina.

¡Llegamos!

Refugio Walter Bonatti, 2025 m. de altura.
Refugio espectacular, muy bien cuidado y moderno.

Por ponerle una pega, el agua caliente va con fichas y dura 3 minutos, como te despistes la experiencia puede ser extrema.

 

377-DES MOTTETS-REFUGIO MAISON VIEILLE. 4ª Etapa

Distancia: 19.48 km.
Desnivel positivo: 1154 m.
Desnivel negativo: 1079 m.
Tiempo empleado: 8 horas 39 min. paradas incluidas.

Pues aquí estamos disfrutando del fresco del amanecer, después de gozar de una agradable noche a 8º en el dormitorio. No he pasado una noche tan fría en mi vida.

Y la mañana no está mucho mas calida.

Entraremos en calor caminando.

Tenemos por delante una cuestita de casi 4 kilómetros y medio y un desnivel de 600 metros de tirón.

Ya veremos como se porta el día, vemos nubes por ahí arriba.

Aunque a ratos no tiene tan mala pinta.

Hace fresquete, aunque el camino es empinado no nos quitamos ropa.

Se jorobó el invento, pillamos nieblas.

Col de la Seigne 2512 m.

Pasamos de Francia a Italia.

Soberbias vistas.

Psché, aquí se ve algo, nos tendremos que conformar porque es lo que hay.
Vamos para abajo a toda leche que aquí no hay quien pare.

Bueno... esto también tiene su encanto ¿no?.

Refugio de la Casermetta, está cerrado, a ver si hay suerte y el siguiente está abierto, la pega es que está a 3 kilómetros.

Ahí lo tenemos ¿Estará abierto?

Mandamos a un par por delante a que lo confirmen.

Glaciar desde el Refugio Elisabetta Soldini.

¡Está abierto!, Ahí van subiendo el resto, ya están oliendo el café recién hecho.

Cuando demos cuenta de los cafés y le metamos un tiento gordo al queso que compramos ayer tenemos que ir hacia allí.

Bajamos al valle, no seguimos por la pista gorda que se veía desde el refugio, tomamos otra que va paralela a su derecha.

Y vemos a una marmota que nos mira curiosa.

A nuestra izquierda hay una fiesta de montañas y glaciares.

 

¡Y entre las nubes se asoma la mole blanca del Mont Blanc!

Solo ha sido un momento pero muy bonito para mi. 

Ahora, a seguir adelante que aún nos queda faena, dos horas y pico todavía.

Las vistas siguen siendo espectaculares.

Dejamos atrás el grandioso murallón y giramos a la derecha, a ver con que nos encontramos.

Desde aquí tampoco están tan mal las vistas.

Entramos en el bosque, a ver si se nos pasa el atracón de montañas gigantes.

Esa bonita pirámide es Mont Chétif, a sus pies está el refugio donde dormiremos esta noche.

Ya estamos casi.

Refugio Maison Vieille, 1956 m.
Esta noche tenemos calefacción en la habitación, yupiii.
El refugio es de los mas ¿llamativos, estrafalarios? en los que hemos estado, pero la cena ha estado divina y el agua de la ducha calentita, no se puede pedir mas.